En el año 23 después de Cristo, Cayo Plinio Segundo cita: "Opinan algunos que los berilos en su estado natural presentan muchos ángulos, y algunos de ellos son los berilos con color del cielo". Sin Plinio saberlo, estaba escribiendo sobre una de las gemas mas hermosas: La aguamarina.
Su color azul verdoso o incluso verdoso claro, cuya tonalidad recuerda las masas de agua. El tono más apreciado es el azul intenso.
La aguamarina cristaliza en el sistema hexagonal, pudiendo encontrar increíbles prismas hexagonales de gran belleza y perfecta simetría, el tamaño que pueden adquirir es impensable en otras gemas. De hecho, para poder observar bien el color de la piedra es preciso que el tamaño de la pieza sea relativamente grande. Prácticamente, todas las aguamarinas de un color azul muy hermoso son el resultado de tratar mediante el calor las piedras verde-amarillentas o incluso ciertos ejemplares de color amarillo pardusco. Algunas aguamarinas pueden presentan el efecto ojo de gato. Tiene una densidad de 2,68 a 2,74, que la distingue de su mayor imitador el topacio azul que cuenta con un peso específico superior. Presenta una modesta dispersión y un índice de refracción bajo (1,570 - 1,575).
Las inclusiones que suele presentar están vinculadas a su nombre, como las gotas de lluvia o copos de nieve.
Se encuentra principalmente en Brasil (en Minas Gerais los mejores yacimientos), India, Rusia, Madagascar, Nigeria, Australia, Birmania , Tanzania y España. Se han encontrado ejemplares de gran calidad en la sierra madrileña.
En el lecho del arroyo denominado Mucuri y a lo largo del Jequitinhonha (Minas Gerais) se encuentran los depósitos más importantes. En dichos lugares aparece una capa de gravilla preciosa de color pardo, denominado "Cascalho". En 1910 se encontró un ejemplar de tamaño gigantesco, midiendo 50x40 cm y pesando hasta 110 kg. Este famoso cristal lo compró un alemán por 25 mil dólares. Tambíen en los Urales han sido encontrados bonitos ejemplares de aguamarina.
La mejor imitación se consigue con espinelas sintéticas coloreadas mediante cobalto hasta que obtienen un azul pálido. La piedra natural con la que se imita a la aguamarina es el topacio azul. Para diferenciar una aguamarina de una espinela sintética o de un topacio es muy sencillo, nos bastará con medir el índice de refracción.
Hay gente que cree que la aguamarina refuerza la claridad mental, que calma a quienes la llevan, protegiéndoles de las tensiones del momento. Hoy en día, se piensa que es el amuleto perfecto para mantener a raya las tentaciones relacionadas con el consumo de drogas, pues transmitirían al individuo una paz y un equilibrio mental que eliminaría la necesidad de estimulaciones artificiales. A veces la llaman la piedra del valor, por que supuestamente hace a sus dueños más valerosos, especialmente ante la muerte. Por su color, es uno de los amuletos favoritos por lo marineros que piensan que les ayudará a enfrentarse a los peligros del mar y también a conseguir una buena pesca.
Dureza: 7,5-8.
Peso específico: 2,68-2,74.
Índice de refracción: 1,550-1,575.
genial
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