Las tropas
Napoleónicas avanzan por Europa y llevan consigo sin darse cuenta
los ideales de la revolución. La revolución industrial que
Inglaterra había iniciado salta al continente y se mezcla con
el liberalismo y el romanticismo que recorre Europa. Las potencias
Europeas se reúnen en el congreso de Viena (1815) y quieren volver
a instaurar el antiguo régimen en Europa pero los ideales de la
revolución son ya imparables. Solo unos pocos países se mantienen
ajenos a las revoluciones de 1848 y uno de ellos es España.
En España
se introduce el liberalismo tras la guerra de la independencia
(1808-1814) pero al instaurarse de nuevo el absolutismo con Fernando
VII, España se dividirá en dos, una liberal y otra regresiva,
enfrentándose durante un siglo. España pierde sus colonias en
Hispanoamérica y Filipinas, y es derrotada por Estados Unidos en la
guerra de Cuba (1898). A finales de siglo comienza a anexionarse
territorios africanos.
Los grandes
imperios coloniales son ahora Inglaterra y Francia que mantienen
colonias en casi todos los continentes. Las potencias europeas se
reúnen a finales del siglo para repartirse el mundo en la
Conferencia de Berlín (1885).
La teoría
de la evolución de Darwin será un duro revés para la Iglesia que
ve desmontarse su teoría de la creación bíblica.
La población
crece considerablemente y verá atendida sus necesidades, pero una
gran parte de la población como los campesinos y obreros ven como el
progreso y la igualdad no les alcanzan a ellos. Son explotados con
condiciones de trabajo miserables donde se les margina a la miseria y
a la incultura, esto animará a la clase obrera al acercamiento hacia
los pensamientos e ideales socialistas, comunistas y anarquistas como
única vía para asociarse y exigir mejores condiciones laborables.
En Estados
Unidos las condiciones de los negros son inhumanas sometidos aún a
la esclavitud, tendrá que ser tras la Guerra de Secesión
(1861-1865) cuando se abolirá la esclavitud.
La mujer en
el tercer tercio del siglo intenta disponer de los mismos derechos
que el hombre o al menos lograr una pequeña emancipación, pero la
seguirán frenando en sus intentos de obtener el derecho al voto o a
sindicarse y solo en casos muy puntuales logra alcanzarlo como en
Suecia (1866) pudiendo votar solo en las elecciones municipales.
Es un siglo
de industrialización y progreso donde los adelantos en materia de
transportes son vitales.
El tren, el
barco de vapor, el motor eléctrico, el telégrafo, el teléfono, la
segadora mecánica, el tranvía eléctrico, el automóvil o el cine
son algunos de los avances que fueron apareciendo a lo largo de todo
el siglo.
El inicio
del siglo XIX se abre con muy pocos cambios en la joyería y es una
continuación del neoclásico del último cuarto del siglo XVIII. Todavía repercuten las guerras napoleónicas en los primeros años
del siglo. Europa sigue sumida en la miseria después de largos años
de guerras y hay una evidente escasez de metales preciosos para la
elaboración de joyas y de diamantes que procedían de la India en
donde las minas comenzaban a agotarse reduciéndose la cantidad de
estos para la realización de las piezas.
Será a
partir de 1820 cuando comienzan a producirse grandes cambios en la
moda y en el diseño de la joyería. Las joyas son esencialmente
discretas, elegantes, lisas, poco originales y con falta de
creatividad. Pero no será
hasta pasado la mitad del siglo XIX, cuando comienza a tener un giro
importante gracias a que es más abundante el metal y los diamantes
que vienen de las nuevas minas descubiertas en Sudáfrica en 1867.
La
mujer ya no tiene que desprenderse de sus joyas fundiéndolas para
hacer modelos nuevos como venia siendo habitual y esas joyas pasan en
herencia a sus familias.
La
nueva aristocracia y la clase media empiezan a demandar más
productos de lujo y hacia la mitad del siglo se comenzara a tener
mayor accesibilidad a los suministros de metal gracias a los
descubrimientos de oro en Estados Unidos y Australia siendo esto muy
importante para la industria de la joyería que resurgiría volviendo
al escenario de la moda. Los joyeros de Londres y París comienzan a
adaptar las joyas a los gustos de los clientes pero sin alterar las
formas básicas.
La
joyería comenzó a elaborar piezas pensadas y diseñadas para
producir grandes efectos al menor coste y esto llevo a que se
emplearan un gran numero de piedras como las amatistas, topacios,
aguamarinas, crisoberilos de origen brasileño y que resultaban muy
favorecidas cuando se montaban en un elaborado y delicado trabajo de
filigrana o de “decoración
de canutillo”,
que precisaba de muy poco oro. La “decoración de canutillo”
apareció simultáneamente en Francia e Inglaterra disfrutando de su
máximo apogeo y popularidad en la década de 1830. Esta técnica fue
conocida en Europa por siglos y es posible que Londres y Francia
recibieran su influencia procedente de Portugal y España, asi como
por el Norte de África y la costa mediterránea siendo esta técnica
muy común.
En
1840 comienza a elaborarse otra técnica que va suplantando a la
decoración de canutillo por el trabajo de oro repujado. Otra
característica destacada de 1830 fue el extendido uso dar tonos de
color al oro añadiendo cobre para dar un tono más rojizo y plata
para dar un tono verdoso. El rojo, verde y amarillo fueron los tonos
combinados para dar un mayor contraste a las superficies en broches,
anillos con motivos de hojas y flores dando realce con el trabajo de
buril y engastando pequeñas piedras como las turquesas o los
granates.
Se produce un revival del rococó entre
los años 1820 – 1840.
Entre el año 1838
hasta el final del siglo conviven juntos varios estilos, etruscos,
egipcios, asirios, griegos, grecorromanos, celtas, helenísticos, es
un continuo revival por la falta de creatividad que hay en ese
momento, donde solo se copian otros estilos sin la capacidad para
crear.
La fuente de
inspiración más frecuente suele ser la grecorromana a diferencia de
XVIII con las campañas de Napoleón.
Francia es
el país que dicta la moda por varios motivos siendo dos de ellos
fundamentales:
- La corte de Napoleón es la más poderosa de Europa.
- Los nobles huyen de Francia y venden sus joyas al extranjero.
La
influencia del mundo Imperial de Napoleón y sus campañas en Egipto
(1798-99) motivan muchas creaciones de inspiración egipcia. El
águila imperial, las coronas de laurel, flor de Loto, esfinges,
escarabajos, palmetas, el león, papiros, serpientes son motivos de
clara influencia egipcia.
Otros
temas son las escenas grecorromanas del mundo de la mitología y los
paisajes de ruinas romanas y griegas.
Los
motivos con hojas de roble, urnas, palomas, sauces llorones, la cruz
y el ancla.
Los
motivos de tipo simbólico ligados al mundo sentimental y funerario.
Los
temas acrósticos dando valor simbólico a las piedras que esconden
un significado o frase leyendo la primera letra de cada piedra
llamadas regards.
En este siglo conviven
varios estilos de joyería desarrollados en diferentes lugares de
Europa que definen e identifican a cada país, aunque sigue siendo
Francia la que marca las pautas.
El Estilo imperio
fue un movimiento artístico desarrollado en Francia y debe su nombre
a Napoleón I (1769-1821) que se coronó a sí mismo en 1804 siendo
el artífice de este movimiento artístico en donde querrá expresar
su dominio y la superioridad de su Imperio. A continuación fue
Napoleón III (1808-1873) quien se coronó en 1852 y el que puso otra
vez de moda este estilo en el llamado Segundo Imperio.
La joyería estilo
Imperio se caracterizaba por ser una joyería que expresaba lujo,
ostentación y grandeza con formas simples y delicadas. Eran piezas
de gran colorido en donde se utilizaban gemas como los peridotos,
amatistas, citrinos, aguamarinas, topacios, crisoberilos o turquesas
rodeadas de diamantes y en oro amarillo dándole un gran colorido a
las joyas.
Se utilizaron materiales
menos costosos en la elaboración de piezas más corrientes para una
clientela más popular que demandaba este estilo de joyería.
Aparecen en la moda los
vestidos llamados de estilo Imperio que favorecen el uso de
gargantillas, collares y broches con los escotes cuadrados y el
talle alto. También aparecen nuevos peinados con el pelo recogido
dejando al descubierto las orejas que favorecen el uso de los
pendientes largos.
El estilo regency
(1811-1830) fue un estilo de muy breve duración en Inglaterra y se
sitúo en medio de dos estilos ingleses de joyería como fueron el georgiano (1714-1811) y el victoriano (1837-1910). Se debe su nombre
al periodo de regencia que vivió Inglaterra cuando el rey Jorge III
promulgó la Ley de Regencia cediendo su trono a su hijo Jorge IV
actuando como regente hasta que murió su padre en 1820, pasando a
ocupar la corona de Inglaterra hasta 1830 año en el que falleció.
Influenciada por la
joyería francesa el estilo regency gusta de mostrar también el lujo
y la grandeza con líneas simples y joyas poco recargadas. La
diferencia la podemos encontrar en que muchas de ellas eran joyas
derivadas de la escultura, arquitectura y la pintura de estilos de
épocas anteriores como el Gótico o el Renacimiento. Otro aspecto
diferenciado era que tenían un marcado carácter sentimental,
evocando el mundo del sentimiento, aunque este aspecto fue común en
la joyería del Romanticismo de la primera mitad del siglo en Europa.
El estilo biedermeier (1815-1848) fue otro movimiento artístico que se
desarrollo en países como Alemania, Austria, Dinamarca, Suecia,
Noruega y norte de Italia.
Este estilo no era como
los desarrollados en Francia e Inglaterra donde se imponía mostrar
todo el lujo y la riqueza de la persona que las portaba, todo lo
contrario de lo que se pretendía en este estilo que era más bien el
de embellecer a la mujer y no mostrar su status social. Piezas de un
naturalismo aburguesado donde se mezclan elementos clásicos y
románticos, muy simples y con falta de inspiración llegando a ser a
veces vulgares por carecer de gusto en su ejecución.
Se diferenciaban las
joyas de la nobleza a las de la realeza por los materiales usados
para la elaboración de las piezas.
Eran joyas con carácter
sentimental de motivos naturalistas florales esmaltados con colores
muy llamativos. La elaboración de estas piezas decoradas con
esmaltes era de una gran realización artística y artesanal por su
cuidada ejecución pictórica, pero no asi con los materiales
empleados pues algunas veces se utilizaban metales como el latón o
el hierro para realizar joyas de bajo coste. El estilo biedermeier
también influyo en otras ramas artísticas como la decoración, la
literatura, etc.
El estilo catedral
1840-1875 inspirado en el mundo gótico y medieval. Muy escultórico,
con arcos góticos de ojiva, con estructuras arquitectónicas y
motivos medievales. Se elaboraron pulseras, anillos y pendientes
decorados con motivos de la arquitectura gotica, largas cadenas y
broches tomaron el aspecto de pequeñas esculturas medievales.
Su máximo
representante fue Emilie Froment-Meurice (1837-1913) inspirado por
el Renacimiento Frances e Italiano. Francés hijo de un famoso joyero
Francois-Désiré Froment-Meurice (1802-1855) que trabajo el estilo
Neorenacentista. Emilie continuo esta tradición, aunque también
realizó trabajos de estilo Art Nouveau para la exposición
Internacional de París de 1900.
A partir de 1840–1880
comienza a elaborarse una joya muy ostentosa y muy grande, periodo isabelino en España y victoriano en Inglaterra, las nuevas riquezas
adquiridas por la clase media y el fácil abastecimiento de los
metales preciosos garantizados por los descubrimientos de nuevas
minas de oro en California y Australia tuvieron una positiva
influencia en la industria joyera la cual volvió a florecer a partir
de la segunda mitad del siglo.
En la Inglaterra de la
Reina Victoria comenzó una importante influencia por la moda. Sus
joyas fueron copiadas por la Corte y por el resto de la sociedad. La
joyería fue usada en abundancia y la joyería intima o sentimental
tuvo un gran auge.
La joyería francesa
tomo de nuevo un nuevo impulso y en 1851 la industria joyera francesa
se relanzó gracias al apadrinamiento de Luis Napoleón que facilitó
la participación de las firmas francesas a la gran exhibición en el
Cristal Palace de Londres donde la joyería francesa tuvo un éxito
notable, sobresaliendo con dos parures hechos para la reina de
España.
El naturalismo alcanza
el éxito en la joyería asumiendo las formas de ramos de flores,
ramas, hojas, racimos de uvas, agrupaciones bayas o frutas. El
interés por el naturalismo estimulado por el movimiento romántico,
propago a introducir en Europa de nuevas y exóticas especies.
La ocupación francesa de Argelia y la importación de productos de origen árabe fueron también una tendencia en la moda y fueron diestramente copiados. Otra fuente de inspiración para la joyería y para las artes en general vino de Asiria después de las excavaciones y los tesoros encontrados en la ciudad.
Muchas expediciones
militares y acontecimientos políticos marcaron e influenciaron en la
moda y los diseños en la joyeria durante los años de 1860 a 1870.
La entrada al Palacio
de Verano de Pekín en 1860 por los franceses y el comercio abierto
con Japón a partir de 1850, ademas de las expediciones francesas en
México y el arte Sudamericano introducen ciertos aires exóticos en
la joyeria. De nuevo tambien volvió el gusto por las joyas indias de
donde venían collares y otros ornamentos con motivos de animales
como elefantes, tigres o collares engastados con garras de felinos.
El viajar comenzaba a ser mucho más fácil y muchas familias comenzaban a pasar sus vacaciones en el extranjero. Italia fue uno de los países favoritos para hacer turismo y los orfebres italianos comenzaron a producir una gran cantidad de joyería a precios razonables siendo adquiridas como Souvenirs.
Los mosaicos romanos y florentinos asi como los esmaltes suizos son un claro ejemplo de este
tipo de joyería.
Fortunato Pio
Castellani (1794-1865) fue el mejor exponente del estilo griego y etrusco, el cual revivió de nuevo inspirado en los descubrimientos
arqueológicos. Junto a sus dos hijos elaboró una gran cantidad de
joyas en estos estilos con una perfecta ejecución en el trabajo,
buscando las técnicas antiguas que se usaban por aquellos tiempos
como la ejecución del granulado etrusco que desarrolló con una
técnica muy parecida a la original. De cualquier modo su técnica y
ejecución eran de una enorme calidad.
Como ya comentamos
antes el desarrollo del turismo favoreció para que sus trabajos
expuestos en su taller de Roma fueran comprados y observados por
muchos visitantes de otros países. Solían firmar sus trabajos con
dos C entrelazadas y soldadas a la joya, aunque usaron tres tipos de
marcas distintas.
El estilo arqueológico
no solo influyo en formas y diseños sino también repercutió en las
técnicas de los joyeros a la hora de usar el oro con los contrastes
de oros mates y brillantes con añadidos de granulados y filigranas.
La moda por el engastado de monedas en la joyeria fue de nuevo
utilizado para los ornamentos de la joyeria estilo arqueológico.
Este estilo de joyería
arqueológica tuvo muy buenos representantes como los ya citados
antes y como los siguientes: Ernesto Pierret, Eugène Fontenay, Carlo
Giuliano, John Brogden.
La moda por los
trabajos de joyería antigua o de estilo arqueológico en Francia,
Inglaterra e Italia comenzaron a decaer a partir de 1880.
Se puede
decir que la joyería actual o moderna parte desde 1880 hasta este
momento.
Materiales
Como metal dominante el
oro que se caracteriza por estar muy bien trabajado. Oro muy fino,
chapas muy delgadas y plata para las vistas de diamantes.
Oro amarillo y a partir
de 1830 comienza a elaborarse otros tonos de color en el oro como los
tonos rojizos y los verdes añadiendo más cobre o plata.
En 1854 se utilizo oro
de 9, 12 y 15 quilates siendo ya legal su uso. Se comerció con el oro
bajo y esto llevó a que bajaran los precios y fueran más asequibles
para más gente.
El Double o Rolled Gold
o Gold Filled se realiza por presión al calor de dos placas de oro y
metal común. El resultado total es un laminado. El metal común se
disuelve añadiendo ácido nítrico, quedando un caparazón de oro
hueco. Su espesor se expresa en micras siendo 1 micra igual a 1
milésima de milímetro. La fabricación de esta técnica data de
1.830.
El hierro
estuvo de moda desde 1815 a 1830 y fue en Alemania, concretamente en
la ciudad de Berlín donde tuvo su origen en 1804. La mayor cantidad
de joyas de este genero se elaborarón entre 1813 y 1815 durante las
campañas de Napoleón, pues los metales nobles se utilizaban para
financiar las guerras. Algunas piezas se terminaban recubriéndolas
con una especie de laca negra.
El acero
facetado comienza en Inglaterra en el Siglo XVIII como sustituto a la
alta joyería de diamantes y que luego se extendió por Europa.
Monedas
antiguas utilizadas para hacer joyas de diseños antiguos como
colgantes, sobre todo en la joyería Inglesa.
Gemas
Se
sigue manteniendo el diamante en talla rosa y talla vieja mina (forma
cojín).
Siempre
los diamantes grandes van descubiertos y los más pequeños con la
parte trasera cubierta. No hay mucha cantidad de diamantes debido al
agotamiento de las minas indias
viniendo de Brasil el resto de la producción hasta el descubrimiento
de las minas de Sudáfrica.
Los
rubíes, zafiros y esmeraldas. Las amatistas, citrinos, topacios,
berilos, aguamarinas, crisoprasas, granates y turquesas.
Las
piedras talladas en cabujón fue una de las preferidas en el periodo
comprendido desde 1840 a 1870 y fueron engastadas entre los
diamantes.
Los
peridotos están muy asociados a la joyería de 1830-1840.
Las
perlas adecuadas para collares y pendeloques
eran también símbolo de riqueza por ser escasas ya que solo se
utilizaban las perlas naturales, siendo a veces más caras que los
diamantes.
Piedras
duras para camafeos, malaquita, coral y concha para la elaboración
de los camafeos más baratos. El coral se utiliza bastante entre los
años 1845-1865 y se uso en todas las formas. La mayoría del coral
que se utilizo procedía del mercado Italiano, y fundamentalmente de
Génova y Nápoles donde era tallado. El color preferido eran el rojo
oscuro y rosa pálido.
En
esta época hay una gran cantidad de especialistas en camafeos y los
mejores artesanos ponen contraseñas para identificar sus trabajos
pues se hacen muchas imitaciones. Los camafeos de coral son muy
propios del neoclásico en España e Italia. Son tipicos los camafeos
en relieve de la 2ª mitad del siglo XIX en adelante.
Hay
que resaltar que el arte de los camafeos es un mundo aparte, pues es
muy difícil poder catalogarlos debido a la gran cantidad y a las
imitaciones. Los italianos y alemanes son verdaderos especialistas en
identificar camafeos. El tipo de montura en donde vienen montados
puede ayudar para descifrar la época en que fue realizado.
Se
utilizan dobletes sobre todo para camafeos, que se hacen sobre vidrio
o sobre capas de calcedonia y un doblete de pasta de vidrio blanca
(troquelados).
Se
llama camafeo de
Aville cuando se
introduce otra piedra tallada y engastada en el camafeo, que
habitualmente solia ser una imagen de mujer con un rubi o un diamnte
talla rosa engastado en el pelo o en el traje sobre la misma piedra.
Esta técnica fue realizada por Dafrique en Francia. Esto vino a ser
popular hacia la segunda mitad del siglo.
Son
utilizados también los vidrios y porcelanas del estilo Siglo XVIII.
En
Inglaterra muchas familias con pocos ingresos o campesinas trabajaban
en la elaboración de dobletes como un modo de ganar algo de dinero
extra para sus maltrechas economías.
Los
mosaicos florentinos y romanos. A partir de 1820 se encuentra una
mejor elaboración en los bordes de los mosaicos florentinos y
romanos.
Durante el
segundo cuarto del siglo el esmaltado fue revivido y muy usado en la
joyería de nuevo. Ginebra fue el centro de pintado de esmalte.
Pequeñas placas de cobre bosquejaban paisajes locales o chicas de la
época realizando costumbres locales.
Las
técnicas de esmaltado como el champlevé
y el guilloché
fueron también parte de la decoración y de la moda. Los colores
dominantes de esmaltado eran “azul royal” y el verde.
El
esmalte tipo Falice
de motivo
naturalista que viene en medallones con guardapelo.
La
marcasita se sigue utilizando para joyas baratas.
El
Niello, imitación
al grabado en donde se hace un surco y se rellena con polvo negro que
viene de la época medieval o bizantina.
El periodo
comprendido entre 1880 y 1890 se produce un momento de crisis con
joyas malas, troqueladas y se produce una protesta generalizada
contra la falta de creatividad, contra todos los Neos, contra la
producción en serie y la mecanización que sé venia introduciendo
desde 1860 en los talleres realizando joyas baratas y de baja
calidad.
La
mecanizacion se introdujo en los talleres de joyería casi a la vez en
Europa y en los Estados Unidos. El fin de siglo se caracteriza por la
joyería producida por los adelantos técnicos y mecanicos que logro
que fuera abordada por todas las personas pero esto llevo a la mala
calidad de la piezas. La creatividad y la espontaneidad fueron
olvidadas por la joyería casi por completo. Esto llevo a que la
mujer simplificara sus ornamentos, sobre todo en Inglaterra, y solo
usase lo minimo para ciertas ocasiones abandonando la moda de la
exuberancia y la ostentación. Fue un mal tiempo para la joyeria y
durante los años 1887 a 1890 en Inglaterra los joyeros casi
sobrevivian en sus talleres.
Tipología
Tiaras
Como
adorno para el pelo son muy características del periodo napoleónico
y suelen tener adornos de hojas de laurel o de ramas de roble, muy
finas y caladas. De uso exclusivo para la nobleza y realeza.
Las tiaras
con camafeos pues los camafeos se utilizarían en todos los
ornamentos.
Grecas en
general, con muy poca cantidad visible, ligeras.
Es típico
en Inglaterra las hojas con bayas y rubíes.
Peinetas
En la parte superior
tienen forma rectangular y se decoran como las tiaras.
Las
españolas se caracterizan por usar la concha de tortuga, que es un
material termoplástico igual que el ámbar.
Este
tipo de trabajo con concha de tortuga se le llama de Concha
Pique. Se calienta
la concha y se presiona con chapas muy pequeñas de oro que quedan
incrustadas quedando todo muy plano y a nivel.
También
se hacen con filigranas de oro.
Pendientes
Los pendientes son muy planos, ligeros
y bastante largos, con cadenas y chapas muy finas.
Los hay de dos o tres cuerpos planos,
de perfil geométrico, ovales, unidos por finas cadenillas de oro.
Las
Poussardas,
predominan de medio aro con cierre en S.
Muy característico en la joyería popular francesa por que eran los
que usaban las vendedoras de pescado en los mercados centrales de
París, de ahí viene su nombre.
Se usaban
pendientes con piedras de color baratas, siempre con recubrimiento y
vidrios para el uso de joyería más asequible que demandaba una
clientela más popular.
Los
pendientes de moda hasta el año 1830 son de un solo cuerpo que
cuelga y con grecas, herencia del Neoclásico. Chapas de oro y
canutillo.
Los
pendientes de dos cuerpos (derivado del Pendeloque)
con la parte superior con un lazo y un cuerpo que cuelga en gota
alargada o en perilla.
Entre los
años 1840-1850 casi no hay pendientes solo dormilonas y esto era
debido principalmente porque las señoras llevaban gorros que le
cubrían las orejas y por lo tanto no necesitaban pendientes, más
tarde como hemos indicado anteriormente el pelo es recogido mostrando
las orejas y pudiendo lucir pendientes de colgar más largos, el
periodo más exuberante y extravagante de los pendientes es entre
1860-1870.
Collares
Lo
predominante son los collares con camafeos, cadenas finas y bordes
sencillos.
Los
collares de Souvenirs
con placas de mosaicos florentinos o romanos que ilustraban lugares
del país.
Luego
el collar tipo Riviere
unido por pequeños eslabones y con piedras de tamaños progresivos,
predominando los de diamantes que van sin recubrimiento posterior.
Se
usa la talla vieja mina y es el último periodo en donde la talla
rosa se usa para tamaños grandes. El Riviere
es un collar que no posee casi valor artístico por su elaboración
sencilla y lo que se pretende es mostrar el valor de las gemas que
van engastadas en él.
También
se usan los collares de piedras de color unidas por dos eslabones.
Las
cadenas tubulares aparecen, aproximadamente, a partir del año
1830.
Los
collares de serpiente los hay de varios tipos, con turquesas, más
selectos con escamas de oro cinceladas y la cabeza con esmalte azul y
diamantes, otros con la cabeza toda en diamantes, otras con los ojos
rojos de rubí y los más económicos (1840-1850) de granates.
Se
mantienen los collares de perlas largos y cortos.
Son
característicos los broches de forma oval para los collares.
Broches
Los
broches son siempre planos y mantienen la tradición del siglo XVIII.
No hay innovaciones en este tipo de ornamento.
No hay innovaciones en este tipo de ornamento.
Los hay en
forma de estrella, de creciente de luna, en forma de sol, en forma de
lazos derivados del Sevigne.
Broches
placas con fondo de esmalte azul real que van orlados de diamantes y
tiene un motivo central.
Broches
florales, semejantes a los del siglo XVIII.
Predominan
los motivos de ramas de laurel o de robles con bayas.
Broches de
camafeos, de mosaico romano o de intaglios. Con los marcos o biseles
muy sencillos.
Broches
Regards
(acrósticas), que
tienen un lenguaje secreto. Cada piedra significa una letra. Esta
unido al mundo sentimental ingles
(Rubí-Esmeralda-Granate-Amatista-Rubi-Diamante-Sapphir).
Broches barras desde 1880 a 1900.
Por último
los broches de carácter sentimental.
Atención a los marcos de los broches para poder distinguir la época en los colgantes.
Atención a los marcos de los broches para poder distinguir la época en los colgantes.
Colgantes
La cruz es
la más difundida y la más usada es la cruz de Malta 1840-90.
En
Inglaterra se le remataban las puntas con pequeñas bolas de plata.
Colgantes
de camafeos y de mosaico romano.
Broches
sentimentales con miniatura pintada en esmalte con orla de perlas
semilla o diamantes y casi siempre con guardapelos.
Colgantes
a la Holbein típicos
con cuatro piedras en talla cuadrada o carre
a cada lado y perla que cuelga entre 1870-1880.
Colgantes
muy frecuentes en 1860 ovales o redondos con una cruz dentro.
Otro
colgante característico del neoclásico es con una lira.
Sortijas
Predominan
las formas ovales, circulares o la marquise.
Sortijas de camafeos.
Sortijas tipo rosetón.
Sortijas
tipo placa con fondo de esmalte e inicial.
Sortijas
jeroglíficas con significados sentimentales y lenguaje secreto,
acrósticas.
Medias
alianzas con tres o cinco piedras, tallas deficientes y monturas
gruesas.
Sortijas
conmemorativas, de recuerdo o de luto en donde suele venir grabado
“in memorian”.
Las
sortijas del último tercio del siglo comienzan a parecerse a las de
nuestro momento actual.
Brazaletes
Brazaletes
en forma de camafeos, intaglio, mosaico romano.
Brazaletes
en forma de bandas anchas de malla de oro y con cierre grande de
filigrana.
Brazaletes
de pequeños eslabones muy planos con pequeños diamantes o granates.
Los
brazaletes acrósticos o también llamadas Regards
que llevan un mensaje secreto utilizando las iniciales de cada
piedra.
En general se llevan varios a la vez y
los hay que pueden ser extensibles.
Se usan mucho con granate y
también las de turquesas calibradas.
Los
brazaletes grandes son de la etapa central del siglo 1840-1870.
Los
brazaletes muy anchos, de banda ancha en tipo tejido y terminando en
flecos colgando se les llama “estilo
jarretera”.
Son típicos de 1860 todos los detalles
en motivos decorativos centrales circulares o centros de rosetón y
el oro tejido o malla de oro.
Riviere de diamantes |
Tiara de finales del S. XIX |
Broche de Garrard para la Reina Victoria |
No hay comentarios:
Publicar un comentario